Con el crecimiento de las tendencias medioambientales y la importancia que tiene la sustentabilidad en la Región y en el mundo, ¿cómo se adaptan los modelos económicos a esta nueva era, manteniendo la productividad?
Hasta el día de hoy, el modelo de economía lineal utilizado para la fabricación de productos, se caracteriza por extraer materias primas, fabricar productos con ellas utilizando grandes cantidades de energía de origen fósil en su mayoría, y desecharlos una vez terminada su vida útil. Este modelo ha ido perdiendo auge, gracias a la renovada consciencia medioambiental en el mundo y el desarrollo de tendencias sustentables en tecnología y muchos otros ámbitos, dando paso al modelo de economía circular, una apuesta para convertir a la industria energética en proveedores de energía limpia y sustentable al mundo, utilizando como herramientas la tecnología y la innovación.
Partamos desde el inicio, ¿qué es la economía circular?
Es un nuevo modelo que surgió para producir y consumir productos, mediante la reutilización y reparación de recursos (materias primas, productos finales, recursos energéticos) con el objetivo de minimizar los residuos generados en cada una de las etapas de fabricación de un producto.
¿Cómo funciona?
Residuos del proceso de fabricación de un producto se convierten en recursos o materias primas que pueden ingresar nuevamente a la cadena de valor. Lo ideal es que estos residuos sean biodegradables y de esta manera evitar o minimizar el consumo de recursos energéticos para que puedan ser transformados nuevamente en productos.
Reutilizar partes de los productos que, una vez finalizado su ciclo de vida, puedan ser parte de un nuevo producto.
Reparar algunos elementos dañados y darles una nueva utilización.
Utilizar fuentes de energía renovable tanto para fabricar el producto como para reutilizar y reciclar.
Considerar el diseño de los productos en particular su deconstrucción, así como su análisis de ciclo de vida para lograr una recuperación de todas las partes que pueden ser biodegradables, reutilizables o reciclables.
Entre las empresas a nivel mundial que ya están aplicando economía circular en sus procesos, existen importantes empresas de construcción y obras, remanufacturando partes y piezas de sus equipos para darles una nueva vida útil.Por otro lado, una de las empresas más grandes de Retail en el mundo, pretende llegar a cero desperdicios mediante programas de intercambio de productos difíciles de reciclar como tablets y smartphones, envases de marca propia reutilizables y reutilizando partes y piezas de los productos con fallas.
La Economía Circular tiene varios beneficios:
Entre las ventajas competitivas que considera la adopción de la economía circular destacan:
Disminución de costos al reutilizar materiales e incrementar sus ciclos de vida, lo que se traduce en una disminución de precios para los clientes.
Uso eficiente de la energía, reducción de las emisiones de CO2 al utilizar energías renovables
Optimización y seguridad de la cadena de suministro.
Investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) en los procesos de producción de los productos.
Nuevas soluciones inteligentes en todo el proceso de fabricación.
Emprendimientos basados en soluciones inteligentes apoyadas por nuevas tecnologías.
Nuevos perfiles profesionales que impulsen e implementen la economía circular.
Mejora de la marca y reputación de la imagen por el impulso de la economía circular a traves de sistemas de producción con energía limpia y eficiente.
Generación de productos fácilmente reutilizables.
Disminución de precios de los productos que consumen los clientes producto de la reutilización de materias primas.
Economía Circular y el caso Chile: ¿Cómo se han involucrado los sectores público-privado?
El Ministerio del Medioambiente ha desarrollado tres ámbitos para posicionar a Chile hacia un desarrollo sostenible impactando en lo ambiental, económico y social.
Implementación de la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP) la cual hace responsable a los productores de organizar y financiar la gestión de los residuos que generan sus productos. El objetivo es darle valor a traves del reuso, reciclaje o de la extracción de la energía contenida en ellas. Además, considera incentivos directos para la industria del reciclaje y mejorar el diseño de productos.
El ámbito de los residuos orgánicos producto de la basura domiciliaria y la reutilización de los residuos de la construcción e industriales en otros procesos.
Catalizar un entorno de innovación y emprendimiento mediante la articulación con Corfo, Ministerio de Economía y la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático. En particular Corfo ya ha presentado la segunda convocatoria “Súmate a la economía circular”
A lo anterior se suma el Foro Latinoamericano de Economía Circular (FEC) que se llevó a cabo en diciembre del 2018. Los principales objetivos fueron compartir experiencias y conocimientos en torno a la economía circular, visibilizar modelos de negocios y emprendimientos, definir una hoja de ruta, determinar oportunidades comerciales como estrategias de desarrollo, repensar el modelo económico lineal por el circular todo esto tanto para Chile como para la región.
La oportunidad de la Industria Energética en la Economía Circular.
Proveer de energías limpias y sustentables al mundo es uno de los aportes de la industria energética a la economía circular. Estas energías se manifiestan en cada uno de los procesos definidos por la economía circular, ya sea la gestión de residuos, el reciclaje y la reparación de los productos que se diseñan, producen y utilizan. Hablamos del uso eficiente de la energía. Las energías limpias se obtienen de recursos renovables como el sol, el viento, las mareas, los ríos, la geotermia y la biomasa producto del tratamiento de residuos orgánicos.
Otro aporte en la economía circular apunta a la innovación y la tecnología utilizada por las industrias energéticas. De acuerdo con el reporte desarrollado por Escenarios Energéticos llamado Futuro de la energía en Chile del 2018, las tres megatendencias en la industria energética son; descarbonización y descontaminación, descentralización y energía distribuida y transformación digital.
Estas tendencias convergen en mayor o menor grado a ser un aporte en la economía circular, dando así oportunidades para el desarrollo de nuevos modelos de negocios, innovaciones y nuevas tecnologías a la industria energética.
